- Nombre completo del personaje:
Mary Alice Brandon Cullen
- Raza:
Vampiro
- Alimentación:
Vegetariana
- Familia:
Cullen
- Edad:
Se transformó en 1901, a la edad de 19 años.
- Descripción psicologica:
Es optimista, creativa y con un gran instinto por la moda. Tiene una gran afición por las compras. Es también una gran persona.
- Descripción fisica o imagen:
Como todos los vampiros, Alice tiene una piel extremadamente pálida. Es bajita en apariencia (mide 1,65m), delgada y con el pelo corto desfilado y alborotado y negro, fue porque en el manicomio donde fue encerrada se lo cortaron así. Sus ojos cambian de negro a topacio dependiendo de su sed. Bella la describe como un duendecillo de facciones finas y, según ella, camina con tal gracia que parece bailar. También se describe la voz de Alice como parecida a la de un ave cantando. Es adicta a la moda y las compras y le fascina vestir a su sobrina Reneesme.
- Habilidad especial:
Ver el futuro mediante visiones. Si las acciones cambian, ella lo ve.
- Historia:
Nació en el siglo XX, alrededor de 1901 en Biloxi, Mississippi. Ahí fue ingresada en un hospital psiquiátrico por tener sueños que luego se cumplían (por eso tiene visiones cuando es vampiro) En su estancia se convirtió en la favorita de un viejo vampiro que trabajaba en el hospital y James, un vampiro cazador, se propuso cazarla, ya que el olor de su sangre lo atraía enormemente.
El vampiro que trabajaba en el hospital psiquiátrico, se dio cuenta de eso y decidió convertir a Alice (cuando ella tenía 19 años) para que James no la pudiese matar. Pero las cosas no se quedaron así, James mató al otro vampiro como venganza.
A lo largo de la saga, Alice descubre más sobre su anterior vida. Así, en Luna nueva después de una serie de investigaciones descubre que tuvo una hermana llamada Cynthia y la hija de esta que todavía sigue viva, viviendo en Biloxi. Además, encontró una lápida con su nombre y la fecha de su "muerte" coincide con la fecha de su ingreso al hospital psiquiátrico.
Alice vio a Jasper Whitlock (su esposo) por primera vez en una de sus visiones. Vio como él buscaba algo que le diera esperanza para seguir con su existencia (una compañera) y decidió darle lo que quería. En 1948 se vieron cara a cara un día lluvioso en una cafetería de Philadelphia donde ella le dijo que desde hacía tiempo estaba esperando su llegada. Y en 1950 se unieron a los Cullen.
Posee un Porsche 911 carrera Turbo amarillo que Edward le regala como recompensa por cuidar a Bella Le gusta la velocidad. La persona más importante de su existencia es Jasper. Disfruta ayudando a Bella en todo, comprándole ropa, haciéndole regalos, etc
-Ejemplo de Roleo:
El día había amanecido nublado, por eso la mayoría se habían ido de caza. Los únicos que quedábamos en la casa éramos Emmett y yo. Él se encontraba en el piso de abajo, mientras yo estaba en la habitación, curioseando en mi armario. Después de un rato decidí que necesitaba comprar más ropa; la moda era una de las cosas que más me gustaban. Pero no me apetecía ir sola. En ese momento recordé que Emmett estaba abajo y no tenía nada que hacer. Sabía que al principio se negaría, pero seguramente le lograría convencer.
Bajé las escaleras dando pequeños saltos y me dirigí al salón, que era el lugar en el que se encontraba mi hermano. Este estaba mirando la televisión, aunque no estaba atento a ella, lo sabía porque la tenía puesto en un canal cualquiera. Me puse delante de la tele para hacerme ver. -Pareces aburrido- comenté. No logré captar su atención, pero sabía que me había visto. -Creo que tengo una idea para divertirnos- agregué después. Por fin logré que me mirara, alzó una ceja mientras me miraba como preguntándome que era lo que quería hacer. Reí divertida. -Tarde de compras- expliqué finalmente. En ese momento Emmett bufó y miró hacia otro lado; la respuesta era negativa. Pero aún así continué insistiendo. Me acerqué al sofá donde se encontraba. -¿De verdad quieres que te siga intentando convencer?- dije poniendo cara de buena, aunque en esos momentos no lo estaba siendo. Él sabía que cuando me proponía algo lo solía conseguir. Suspiró como dándose por vencido. -¡Genial!- exclamé con una sonrisa y tirando de su brazo para marcharnos de allí.